Chimy Ávila estuvo a punto de firmar por el Betis en el verano de 2019

La compleja situación del Betis de cara a puerta ha propiciado diversos movimientos en la parcela ofensiva en este mercado invernal. Además de Pablo Fornals y Cédric Bakambu, el argentino Chimy Ávila ha aterrizado en Heliópolis para apuntalar la delantera verdiblanca tras las salidas de Borja Iglesias y Luiz Henrique. Casualidades -o circunstancias- del fútbol, Chimy ya estuvo muy cerca de firmar por el Betis hace varias temporadas, una operación que se ha producido ahora, cinco años más tarde.

Corría mayo de 2019 cuando el rosarino Chimy Ávila, a sus 25 años, estuvo a un paso de convertirse en nuevo delantero del Betis. Sus agentes, Jorge Bilicich y Carlos Bilicich, tuvieron una importante reunión en el Benito Villamarín con el director deportivo de la entidad, en aquel momento Lorenzo Serra Ferrer, quien recibió a los representantes en su despacho. Chimy era una de las opciones mejor valoradas para renovar la delantera bética y de ahí que las negociaciones con el jugador se entablaran antes del comienzo del mercado.

El Betis eligió a Borja Iglesias

Las conversaciones que se mantuvieron en aquella reunión fueron francamente positivas y el argentino se aproximó considerablemente al Betis. El sudamericano cuajó una gran temporada en Huesca y era momento de dar un salto de nivel. Sin embargo, Serra Ferrer dejó de ser director deportivo semanas más tarde, lo que cambió en cierta medida la planificación de los verdiblancos, quienes fueron en última instancia a por Borja Iglesias, abonando su cláusula de 28 millones de euros al Espanyol.

Por aquel entonces, Chimy había marcado diez goles en el Huesca y tenía ofertas de todo tipo en España, mientras el Panda acumuló 20 tantos y era otro de los delanteros más pretendidos del país. El Betis se decantó en 2019 por el gallego... y ahora firma al argentino, que en ese verano acabó fichando por CA Osasuna por 2,7 millones. Tras elegir al santiagués por delante del sudamericano en aquel mercado, cinco años más tarde y después de dos lesiones de ligamento cruzado y muchos goles en El Sadar, Chimy será el sustituto de Borja Iglesias en el conjunto heliopolitano.

La insistencia del argentino para fichar por el Betis

Cinco años después de aquella reunión que queda en anécdota, el club sevillano volvió a llamar al Chimy en este mercado invernal. Y el rosarino no tuvo que pensárselo. Su intención siempre ha estado definida desde que apareció la opción verdiblanca: jugar en Heliópolis. Así se lo ha transmitido en todo momento a sus agentes, quienes han rechazado todas las ofertas que había sobre la mesa con el objetivo de aterrizar en la capital hispalense.

No han sido sólo palabras o intenciones, sino hechos. Es sencillo transmitir que un futbolista quiere jugar en un club, pero no tanto demostrarlo. Y Ezequiel Ávila ha puesto todas las facilidades para ser ahora nuevo jugador bético. De hecho, el Betis tardó menos de 24 horas en ponerse de acuerdo con sus agentes en las condiciones de su fichaje, lo que demuestra su hambre por triunfar en el Benito Villamarín.